Noticia
de estos últimos días. Navantia Ferrol reparará y modernizará dos
buques de guerra argelinos. Y esto, que generalmente es motivo de
alegría, ahora y por las circunstancias que se viven en la factoría, es,
cuando menos y en mi opinión, un acontecimiento que invita al análisis
profundo y a la reflexión antes de efectuar valoración alguna.
Y
es que la pregunta que nos tenemos que hacer es: ¿Quienes van a
intervenir en esa obra? ¿Y por qué nos preguntamos esto? Pues porque
como en nueva construcción, desgraciadamente, ya no quedará apenas donde
clavar una punta cuando llegue el primero de los dos buques argelinos,
lógico es pensar que quienes vayan a desarrollar esa tarea sean los
propios trabajadores fijos de plantilla del astillero que ya estarán
prácticamente sin trabajo.
Y
claro, si esto se confirma, ¿cual es el problema? Pues el problema está
en que el presupuesto que en su momento se elaboró para concurrir al
concurso por este contrato, se hizo basado en una serie de cuestiones
que ahora podrían volverse totalmente en contra y además, con efecto
multiplicador. Por ejemplo: 1º) El valor hora de los trabajadores de la
empresa principal es más de un 100% del valor hora del de las empresas
auxiliares. 2º) La productividad de los trabajadores de la principal
está – en estos momentos – aproximadamente un 30% por debajo del de las
auxiliares ( al menos en Reparaciones ). 3º) Los trabajadores de la
principal – en líneas generales – no están habituados a trabajar en las
condiciones que generalmente se trabaja en reparaciones, con lo cual, la
productividad en esos trabajadores bajaría todavía más. 4º) En
reparaciones se hace necesario tener una presencia casi permanente, y
aquí, en este punto, podríamos fácilmente entrar en un nuevo orden de conflictos con los trabajadores de la principal no habituados a esa presencia continua…..etc.
Es
decir, el presupuesto con el que se ganó el concurso podría
multiplicarse muy considerablemente y por lo tanto, la obra resultar
extraordinariamente ruinosa, económicamente hablando. Pensemos por un
momento que estamos hablando de un presupuesto de unos 75 millones de
euros, el equivalente a la facturación total anual que Reparaciones
viene realizando en estos últimos años.
Un
presupuesto este, que en el concepto de salarios estará situado,
aproximadamente, en el 65% del mismo, lo que significa, que estamos ante
el apartado más importante de la operación, y por eso y al mismo
tiempo, ante la gran debilidad de Reparaciones con este contrato. Ésta y
no otra, es también realmente la verdadera y auténtica razón de fondo
por la que es tan importante hacer el Dique Flotante que se demanda. El
Dique Flotante más que la solución a la falta de trabajo que se sufre en
nueva construcción, que también, es o puede significar, la
supervivencia, sin grandes sobresaltos, de Reparaciones.
Reparaciones,
que hoy y tras mucho trabajo y sacrificio, es un referente mundial,
dejaría de ser competitivo si tuviese que realizar todo su trabajo con
el personal fijo de plantilla, y no porque no sean buenos profesionales,
que lo son y además excelentes, si no, fundamentalmente, por el elevado
coste de su valor hora con respecto al mercado en el que se tiene que
mover. Si Carenas tiene que competir con los niveles salariales de la
plantilla fija de empresa, automáticamente se queda fuera del mercado de
Reparaciones.
Y
es aquí, en esta cuestión, en donde tenemos que pararnos a reflexionar y
en donde radica la pieza fundamental del puzzle del demandado Dique
Flotante. La gran debilidad de Reparaciones no está en la misma
Reparaciones, y si, en una carga de trabajo igual a cero en la nueva
construcción. Reparaciones fue, es y seguirá siendo, extraordinariamente
importante para Ferrolterra, por lo tanto, obremos con sentido común y
cuidémosla.
Fdo.) Jesús Varela Rivas
DNI : 32.598.286
*Jesús Varela Rivas fue Jefe de Aceros de Reparaciones Fene - Ferrol
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