- De ellos, 2.478 millones fueron aportaciones por parte de la Sepi...
- ...y el resto derivado de los EREs de de astilleros de Sestao y Manises
Esta cantidad se reparte entre 2.478,4 millones de euros en concepto de aportaciones a los astilleros públicos dependientes de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) y los 1.037,3 millones derivados de los compromisos del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en Izar, que afectó a 3.983 trabajadores, y los de astilleros de Sestao y Manises, sobre 356 empleados.
Núñez ha recordado que este proceso se ordenó en dos fases, la primera de ellas entre 2000 y 2004, bajo el Gobierno de José María Aznar, con el objetivo de conseguir la "rentabilidad económica" del grupo empresarial Izar, que se creó un año más tarde.
La segunda fase dio comienzo en julio de 2004, motivado por las "importantes pérdidas" de 2.600 millones que acumulaba Izar y por la decisión de la Comisión Europea de declarar ilegal las aportaciones públicas tanto a esta empresa pública como a Astilleros de Puerto Real, Sevilla y Sestao (AESA), obligando a su devolución por un importe total de 1.343 millones de euros.
En ese momento, quedaban pendientes de reintegro 1.124 millones de euros, por lo que Izar constituyó a finales de 2004 una provisión de 1.249 millones de euros que se mantuvo durante los restantes ejercicios fiscalizados.
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero decidió liquidar Izar y transformarla en Navantia con los activos que quedaron tras la venta de los astilleros de Gijón, Sevilla y Sestao.
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