Los tres grupos con representación parlamentaria -PP, PSOE y BNG- aprobaron este martes por unanimidad una moción defendida por el diputado nacionalista Henrique Vieitez en la que propone una batería de medidas para garantizar el futuro del sector naval en Galicia, clave en las comarcas de Vigo y de Ferrol. Entre otras cuestiones, la moción insta a la Xunta a evitar despidos precipitados y a habilitar una línea especial de avales para el sector, que permita refinanciar la deuda y garantizar la viabilidad de las empresas.
Vieitez defendió la necesidad de la propuesta para combatir las dificultades que atraviesa el sector, sometido a constantes expedientes de regulación de empleo por la "merma progresiva en su carga de trabajo". En esta línea, la moción aboga por impedir que la capacidad de producción de los astilleros disminuya o por desarrollar un plan específico de formación para elevar la cualificación profesional de los trabajadores.
La iniciativa también aboga por potenciar el centro de reparaciones en la ría de Vigo, aprovechando las sinergias existentes en el entramado industrial y derivado del tráfico del puerto y de su propia localización en una zona de intenso tráfico marítimo. Otras propuestas buscan reforzar el papel del Cetnaga (Centro Tecnolóxico do Naval Galego) -como lugar de confluencia de la Administración gallega, el conjunto del sector y las universidades-, poner en marcha una unidad tecnológica oceanográfica o potenciar las acciones de I+D+i.
Por lo que respecta al Gobierno central, el BNG insiste en la necesidad de que se elimine el veto a la construcción civil en Navantia, que la Sepi dinamice el centro de reparación de este astillero y que se promuevan dentro de la Unión Europea (UE) nuevos mecanismos de financiación a largo plazo del sector, creando un instrumento europeo para apoyar económicamente a los astilleros y a la industria auxiliar.
En la votación del texto, el PSdeG se posicionó en contra de uno de los puntos reclamados por el BNG, el referido al cobro de una cuota para aquellos barcos que toquen regularmente los puertos europeos pero que no hayan sido construidos en astilleros comunitarios. El diputado socialista José Luis Méndez Romeu alertó de que la propuesta tiene una "más que dudosa legalidad", a lo que el nacionalista Henrique Vieitez replicó que en Estados Unidos tienen un arancel similar, por lo que defendió su iniciativa "cuando menos hasta que no haya reglas de juego consensuadas para todo el mundo".
Protesta de la CIG
Coincidiendo con el debate en el pleno de la Cámara, una veintena de representantes del sector naval se concentraban ante las puertas del Pazo del Hórreo, convocados por la CIG, para reclamar atención al sector. 'Queremos carga de trabajo en los astilleros', rezaba el lema de la pancarta que exhibieron.
Algunos de los manifestantes siguieron la sesión desde el hemiciclo, en el que el diputado del BNG Henrique Vieitez reivindicó que la actividad principal del sector naval -la construcción y reparación de barcos- debe seguir siendo la prioridad. "No estamos en contra de la diversificación de los astilleros, pero no debe sustituir la actividad principal", proclamó Vieitez.
Por su parte, el diputado socialista José Luis Méndez Romeu calificó la iniciativa del BNG de "oportuna y ajustada a las necesidades del sector", y defendió la necesidad de activar políticas de I+D+i que persigan la aprobación de patentes y la mejora de la competitividad a través de medidas como la extensión del sello naval. Desde el PPdeG, la diputada ferrolana Natalia Barros defendió la actuación del Gobierno gallego con el sector naval, con la inversión de casi 80 millones de euros desde el inicio de la legislatura, y la contrapuso a la del Ejecutivo central, al que acusó de "lastrar todavía más al sector".
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