Barreras cerrará en febrero el contrato de tres nuevos buques por 500 millones

El astillero confirma que se trata de dos "ferries" de 205 metros para la naviera Armas y un barco de apoyo a plataformas petrolíferas para la multinacional mexicana Pemex

J. CARNEIRO - VIGO

Barreras confía en volver a llenar pronto sus gradas de barcos. El presidente del mayor astillero vigués, José Francisco González Viñas, anunció ayer que el plazo máximo de un mes cerrará el contrato de tres nuevos buques por 500 millones de euros, que aportarán carga de trabajo hasta finales de 2012. Se trata de otros dos ferries para la naviera canaria Armas, de 205 metros de eslora y con un valor de 350 millones de euros, y un buque off-shore de apoyo a plataformas petrolíferas para la multinacional mexicana Pemex, con un precio de 150 millones. Al margen de estas contrataciones, que González Viñas da por aseguradas, el astillero puja por otras cuatro embarcaciones (al menos otros dos off-shore) que, de confirmarse, garantizarían la actividad en sus gradas hasta 2013.

El patrón de Barreras aprovechó la botadura del Volcán de Tinamar, el último ferry de Armas que le queda en cartera, para esbozar las líneas generales de su plan estratégico para el próximo bienio, y que parte de la contratación de estos tres buques.


La negociación con Armas para la construcción de los dos ferries arrancó hace más de un año, y tardó en consolidarse debido a las dificultades de financiación que afectan al sector y a cuestiones técnicas, sobre todo el tamaño de los barcos, que alcanzan los 205 metros de eslora. González Viñas explicó ayer que para acometer esta construcción reforzarán las gradas del astillero, para que puedan soportar el peso de estos gigantes del mar, cada uno de los cuales supera las 20.000 toneladas (el Volcán de Tinamar, botado ayer, pesa 13.000 toneladas). "Tenemos que reforzar los cimientos de las gradas para que aguanten el peso. Se hará de forma simultánea a la construcción", precisó.

El tercer buque que prevé cerrar Barreras será toda una innovación desde el punto tecnológico, según avanzó el astillero. Se trata de una embarcación de apoyo para plataformas petrolíferas cuya misión será reciclar las emisiones (sólidas, líquidas y gaseosas) de estas instalaciones de extracción de crudo. "Este barco llevará a bordo una planta de procesamiento enorme. Los residuos pasarán a unos tanques, que posteriormente se trasladan a unas barcazas que los llevan a tierra para su tratamiento industrial", resumió González Viñas. Este prototipo pasará a engrosar la flota de la petrolera mexicana Pemex y tendrá su base de operaciones en el Caribe.

Los dos ferries de Armas y el off-shore reactivarían la construcción en Barreras a partir del mes de junio, y blindarían la actividad del astillero hasta finales del próximo año. 

A mayores, según explicó González Viñas, la empresa aspira a cerrar el contrato de otras cuatro embarcaciones en el segundo semestre del año de las que al menos dos serán off-shore, lo que daría tranquilidad al astillero hasta 2013.

La botadura de ayer reunió al presidente de la naviera Armas, Antonio Armas, así como a la directora general de la Marina Mercante, María Isabel Durántez; al conselleiro Javier Guerra y al alcalde Abel Caballero. El buque tiene capacidad para 1.500 personas y tiene once cubiertas. Al igual que su gemelo, el Volcán del Teide, es el barco más grande construido en la historia de la Ría, y de más potencia instalada.