Vulcano ha quedado este viernes abocado a entrar en proceso concursal (antigua suspensión de pagos) tras cancelarse la venta de su filial Juliana y no celebrarse la junta de acreedores por falta de quórum.
Según han informado los sindicatos, los principales acreedores de Juliana --Pymar y Banco Popular-- no han acudido este viernes a la cita en Oviedo, con lo que ha quedado suspendida la venta del astillero asturiano a Armón, y se ha iniciado su proceso de liquidación.
Los representantes de los trabajadores también han confirmado que esta situación compromete el futuro de Vulcano, que sólo podrá mantener la actividad a corto plazo, y eso siempre que la Xunta facilite los avales necesarios para terminar el buque sísmico que se construye en la grada viguesa. Ante esta situación, los trabajadores han decidido mantener su encierro en las instalaciones de Vulcano y prevén reunirse en las próximas horas con la dirección para negociar cómo se enfoca el futuro de esta empresa, que cuenta con alrededor de 130 trabajadores en plantilla, pero de la cual dependen en torno a mil operarios contando el empleo directo e indirecto.
El presidente del comité de empresa, Antonio Fernández, ha afirmado en la asamblea de trabajadores que "llegados a este punto, hay que activar el compromiso del conselleiro Javier Guerra para terminar el 533 con avales del Igape". Asimismo, ha explicado que no descartan convocar movilizaciones a medio plazo, en función de cómo se resuelva la situación del astillero.
Fernández ha subrayado que, con los avales del Igape, "en dos o tres semanas habría unas 400 personas trabajando", y ha lamentado que Pymar y el Ministerio de Industria "parece que apuestan por que no se trabaje". "Igual lo que quieren es cerrar los astilleros", ha señalado.
Con respecto a la posición del alcalde de Vigo, Abel Caballero, quien ha expresado su apoyo a la empresa, aunque le ha recriminado que no se pusiera en contacto con él para pedir su mediación ante Industria, el presidente del comité ha precisado que "se hizo un llamamiento a través de los medios a todas las administraciones". "Todos saben que estamos encerrados, y el que quiso venir, vino", ha apuntado, en referencia a la reunión mantenida este jueves con Javier Guerra.
L. PIÑERO/M. CASTRO - VIGO/OVIEDO Factorías Vulcano vive las horas más difíciles de su prolongada historia. La más que probable negativa de Asociación de Pequeños y Medianos Astilleros en Reconversión (Pymar) de adherirse al convenio de la junta de acreedores de su filial Juliana que se celebra hoy en Gijón y su rechazo a avalar los 30 millones para que el astillero de Teis pueda terminar la construcción del sísmico 533 y su posterior venta han puesto en jaque a la empresa que cuenta en estos momentos con 177 trabajadores y otros 40 de las industrias auxiliares.
El acuerdo con Armón para la venta de Juliana será sólo papel mojado si como se prevé Pymar (organismo público privado participado por el Ministerio de Industria, comunidades autónomas con actividad naval y los astilleros), que acumula la mayor parte de la deuda del astillero asturiano, rechaza el convenio de acreedores presentado por la empresa con una quita del 79%.
Apoyo de la Xunta
La situación es tan grave que el conselleiro de Economía, Javier Guerra, se desplazó a primeras horas de la tarde a Vigo, al término de Consello de la Xunta, para reunirse con la dirección y el comité de empresa de Vulcano. Guerra mostró todo su apoyo al astillero y aseguró que para la Xunta es "una pieza esencial en el tejido industrial de la comarca viguesa". El conselleiro confirmó que el representante del Gobierno gallego que acudió a la comisión ejecutiva de Pymar celebrada el miércoles fue el único que votó a favor de la concesión de avales a Vulcano para la terminación del sísmico 533 que permitiría al astillero seguir teniendo carga de trabajo.
Javier Guerra, en declaraciones a FARO, señaló que la Xunta lleva mucho tiempo trabajando para apoyar la viabilidad de Vulcano. En este sentido, recordó que ayer mismo el Consello de la Xunta aprobó una aportación de 2,6 millones de euros al fondo de garantía de Pymar. "Esto no se decide de un día para otro. Esto quiere decir que llevamos mucho tiempo trabajando no sólo por el futuro de Vulcano sino también por el resto de los astilleros gallegos", manifestó.
Añadió que a estos 2,6 millones de euros hay que sumar los 8 millones de euros aportados el año pasado y avanzó que "que están comprometidos otros 5 millones para 2011, además de tener dispuestos otros 9 millones de euros para respaldar la deuda de Vulcano a través del Igape".
Guerra lamentó que su departamento "lleva mucho tiempo trabajando para sacar adelante a Vulcano" y añadió que "es incomprensible que este astillero no pueda tener actividad teniendo carga de trabajo y con el respaldo de Gobierno gallego para hacer frente a su financiamiento".
"La consellería de Industria es parte de la solución no del problema" y criticó la "incomprensible decisión de Pymar" de no avalar la terminación del buque sísmico 533.
Nueva reconversión
El secretario del sector del Naval de CC OO en la comarca de Vigo, Ramón Sarmiento, aseguró que la salvación de los dos astilleros, Vulcano y Juliana, va a depender de la decisión que tome el ministro de Industria, Miguel Sebastián, en las próximas horas. "Solo él puede ordenarle a Pymar que acepte el convenio de acreedores", afirmó Sarmiento.
Sarmiento advierte de que en el caso de que no se produzca este apoyo al convenio por parte de Pymar y del Banco Popular Juliana tendría que entrar en un proceso de liquidación y Vulcano en un concurso de acreedores "que haber cómo puede salir de él. El gobierno quiere dejar morir al astillero vigués".
Sarmiento denuncia que existe una decisión política de rebajar el peso de la construcción naval en España y cree que "se está empezando por Galicia y Asturias". "El proceso de venta de Juliana ha seguido fielmente el plan diseñado por Pymar que es quien ahora dice que no da su apoyo", dijo para finalizar.
Por su parte, el consejero de industria del Principado, Graciano Torre, comunicó ayer a directivos del grupo naviego el fracaso del plan que permitiría a Armón adquirir en un plazo breve los activos de Factorías Juliana, mediante la aprobación de un convenio con los acreedores, con una quita del 79% de la deuda. La venta de las instalaciones de Juliana a Armón habría permitido obtener 16 millones de euros con los que pagar el 21% de deuda restante. Ahora, sin embargo, Juliana entrará en un proceso de liquidación que arrastrará previsiblemente a un concurso de acreedores a su empresa matriz, el astillero vigués Factorías Vulcano.
Aunque al cierre de esta edición, a última hora de la noche de ayer, aún se mantenían contactos entre las partes para tratar de enderezar la situación, la entrada inminente en un proceso de liquidación de Factorías Juliana y el posterior proceso concursal de Factorías Vulcano, se daba por hecho por múltiples fuentes. De hecho, el Principado pidió a Armón que retirara su oferta por la compra de las instalaciones. Torre se dirigió a Armón después de haber mantenido, en la mañana de ayer, una reunión con el segundo de abordo de Pymar, Ernesto Costa y con el titular del juzgado de lo mercantil número uno de Oviedo, Alfonso Muñoz Paredes.
El motivo del fracaso del plan es el rechazo de Pymar a pagar al principal acreedor de Juliana, el Banco Popular, 20,2 millones de euros que la entidad financiera perderá tras la cancelación del buque sísmico 535. En contra de lo que suele ser habitual en el proceso de construcción de barcos, la entidad financiera concedió a Factorías Juliana ese dinero sin el correspondiente contraaval de Pymar. Un riesgo que le puede salir caro. El Banco Popular quiere ahora recuperarlo todo y Pymar se niega, con lo que la entidad financiera se muestra reacia a aprobar un convenio de acreedores con una quita del 79% de la deuda, lo que supondría la renuncia a casi 16 millones de euros de los 20,2 citados.
La situación se complica aún más porque Pymar tampoco ha dado su conformidad al Banco Popular para que apruebe el convenio de acreedores, con lo que si la entidad financiera vota a favor del convenio, perdería el derecho a reclamarle a Pymar otros 22,43 millones de euros en su condición de contraavalista.
Se da la circunstancia de que la compra de las instalaciones en un proceso de liquidación era precisamente la opción que había barajado inicialmente Armón. Fueron precisamente los planes de Pymar los que impulsaron un plan para que la compra de los activos se llevara a cabo sin la disolución de Factorías Juliana, ante el riesgo de que de rebote provocara el cierre de su empresa matriz, Factorías Vulcano. Ahora Pymar ha cambiado de idea, al dudar de la viabilidad de Factorías Vulcano, según explican responsables sindicales.
De hecho, el consejo de administración de Pymar rechazó el pasado miércoles conceder un crédito de 21 millones de euros a Factorías Vulcano para que pudiera terminar de construir el buque sísmico 533. De esos 21 millones, el organismo controlado por el Ministerio de Industria sólo costeraría algo menos de 5 millones de esa cantidad, ya que la Xunta de Galicia iba a entregar a Pymar 16,5 millones de euros entre 2010 y 2011.
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