ASTANO, el colosal astillero de la ría de Ferrol, lleva más de veinte años sin poder construir buques civiles. La situación que desembocó en dicha prohibición arranca de la crisis por la que atravesó el sector naval mundial en los años setenta pero la entrada de España en la Unión Europea será determinante para la imposición de los vetos al astillero. En 1983 el ministro socialista Solchaga, bajo el gobierno de Felipe González, anuncia la primera reconversión naval que se llevaría a cabo entre los años 1984 y 1987. La UE exigía al gobierno socialista que redujera su capacidad de construcción naval , lo que hizo a costa de Astano excluyéndolo del mercado civil y permitiéndole, tan solo, trabajar en el mercado off-shore, plataformas petrolíferas, dicha prohibición se establecía hasta el 31 de diciembre de 2007. Este primer acto se salda con un drástico recorte del número de trabajadores que pasa de siete mil a dos mil.
En el arranque del segundo acto ya gobierna el PP, estamos en 1997 y en el marco del plan estratégico de competitividad 1994-1997 del sector de la construcción naval en España, la Comisión Europea aprobó un último paquete de ayudas, después de que el Gobierno español se comprometiera a que los astilleros públicos no percibieran más ayudas de reestructuración, rescate, compensación de pérdidas o privatización.
El gobierno sabe que desde ese año 1998 las ayudas a los astilleros son ilegales.En 1999 la SEPI compra los astilleros de Juliana (Gijón) y Manises (Valencia), pertenecientes a Astilleros Españoles (AESA). En agosto de 2000 la Comisión Europea incoa un procedimiento de investigación de dicha operación. En diciembre de 2000 la SEPI creó Izar, fruto de la absorción de AESA por parte de la Bazán que pagó el precio simbólico de una peseta. En noviembre de 2001 la Comisión amplió la investigación incluyendo también esta operación.
En 2004, poco antes del levantamiento del veto, a pesar de los recursos planteados por el gobierno de Aznar, la UE declara ilegales las ayudas estatales concedidas por parte de la SEPI a los astilleros públicos de IZAR por valor de 975 millones de principal, más 312 millones de intereses sumando un total de 1.287 millones de euros que Izar debería devolver a la Sepi, iniciándose con este nuevo golpe la última reconversión naval.
Tercer acto, finales de 2004, gobierna Zapatero. El acuerdo entre los sindicatos y la SEPI sirvió de base para que el gobierno pactara con Bruselas la no devolución de las ayudas declaradas ilegales y supuso la disolución de Izar y la creación de un nuevo grupo público , Navantia, en el que se integran los centros de Ferrol, Fene, San Fernando, Cartagena, Puerto Real y Cádiz y la privatización del resto de las factorías. Navantia construirá barcos militares y podrá dedicar un 20 por ciento de su facturación al mercado civil hasta el 2015.
Posteriormente el gobierno aseguró que para que Bruselas autorizase el pacto prohibía expresamente a las factorías de Astano y San Fernando la construcción de buques civiles, de ahí que no puedan siquiera beneficiarse del 20 por ciento de la cuota de Navantia.
18 de septiembre de 2008, la Comisión Europea archiva el expediente de Izar, pero con la salvedad de que es una simple noción administrativa por lo que su archivo no quiere decir que las obligaciones y compromisos que se han contraído y establecido con respecto a este expediente hayan desaparecido. Por lo que el ministro Sebastián declara en febrero de 2010 que la negociación del levantamiento del veto supondría reabrir el expediente de Izar.
Octubre de 2010. Todo parece indicar que si no surgen nuevas prórrogas Astano vuelva en el 2015 a su razón de ser.
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