sábado, 7 de agosto de 2010

El astillero Navantia, de Cádiz, de brazos cruzados

El astillero de Cádiz ha colgado el cartel de parado a la espera de nuevas cargas de trabajo. La actividad se ha reducido al mínimo en un sólo mes tras culminar el pasado julio la reparación de la fragata 'Castilla'. Desde entonces, los trabajadores de la planta gaditana cubren su jornada laboral con tareas de mantenimiento mientras aguardan la firma de algún contrato que devuelva el pulso al dique. 
 
 
La situación no es nueva. Se veía venir. El portavoz de CC OO en el astillero de Cádiz, Manuel Núñez, alertó en junio del parón que sufriría el dique de reparaciones este verano si no entraban nuevos encargos a corto plazo. El ritmo se ha mantenido hasta la fecha gracias a la inspección técnica girada al buque 'Castilla' durante los dos últimos meses tras su vuelta de la misión en Haití. La fragata ya se ha entregado a la Armada y, de momento, no hay nuevos encargos. El presidente del comité de empresa de la factoría de La Isla, José Antonio Oliva, confirmó ayer la situación de inactividad por la que atraviesa la planta de Cádiz y adelantó que el ritmo de trabajo en el área de reparaciones se reduce sólo a pequeñas actuaciones en los barcos de Salvamento Marítimo y a dos patrulleros de la Armada.
 
 
En esta misma línea se pronunció ayer el portavoz en la Bahía de la industria auxiliar naval, Juan Arroyo, de UGT, que cargó las tintas contra los diputados gaditanos del PSOE, «por tantas promesas que no se cumplen». Arroyo recordó la reunión que mantuvieron los representantes de los trabajadores de las empresas auxiliares con la diputada Mamen Sánchez y el secretario local del partido, Federico Pérez Peralta, donde se tranquilizó a la plantilla con expectativas sobre nuevos encargos de Defensa en relación al Barco de Acción Marítima (BAM), «que no acaban de concretarse». Arroyo lamentó la dependencia que ha tenido Navantia estos años de la Armada «y ahora la Armada le ha cerrado el grifo».
 
A primeros de junio, el almirante jefe de Apoyo Logístico, Manuel Otero, visitó las instalaciones del astilleros gaditano y trajo en su carpeta un mensaje del Ministerio de Defensa que ponía en una situación muy complicada al área de reparaciones de Navantia. La Armada, por cuestiones económicas, cancelaba el programa de modernización de su flota, que firmó con la compañía naval en 2006. Este plan de actuaciones recogía la reforma integral de seis fragatas y del portaviones 'Príncipe de Asturias'. Finalmente, se han mejorado sólo cuatro buques, por valor de 200 millones de euros, y han quedado en el aire dos fragatas y el portaviones. Este mensaje supuso un varapalo para la compañía, que se ha vistio obligada a acelerar las negociaciones para firmar contratos civiles.
De esta forma, fuentes de la dirección de Navantia han señalado a LA VOZ que la compañía negocia intensamente con Iberocruceros la firma de un convenio para que la flota de esta empresa, cuatro barcos, se repare en Cádiz.
De momento, las reparaciones en Cádiz están bajo mínimos.

No hay comentarios: