Los astilleros de Navantia sufren una "complicada" situación. Lo reconoció ayer Aurelio Martínez, el presidente de la compañía naval, de la que dependen las tres factorías de la bahía de Cádiz. Puerto Real acogió ayer la puesta a flote del segundo de los cuatro buques de acción marítima encargados por el Ministerio de Defensa. En estas plantas apenas hay dos años de trabajo garantizado. Después no hay nada. "Estamos presentándonos a todos los concursos en todos los países pero la crisis y los recortes presupuestarios han afectado directamente a la contratación de nuevos barcos", admitió Martínez.
El presidente de Navantia admitió sin tapujos las dificultades que atraviesa la empresa y no tuvo tampoco problemas en acercarse al medio centenar de operarios que ayer se concentró durante el acto de flotadura para exigir más cargas de trabajo. Les estrechó las manos pero no convenció a los operarios. "Es desesperanzadora la falta de noticias y de compromisos", se lamentó el presidente del comité de Navantia Puerto Real, Ramón Linarez.
Preocupa ahora la repercusión que la falta de carga de trabajo tendrá a partir del año que viene en las plantillas. La ministra de Defensa, Carme Chacón, quien amadrinó el acto, se marchó de Puerto Real sin anunciar ningún nuevo encargo de Defensa para los astilleros.
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Navantia reconoce “dificultades” para continuar más allá de 2011
Los astilleros de Navantia en Cádiz van a tener serias dificultades para mantener su nivel de actividad a partir de junio del año que viene. Así lo manifestaba ayer el propio presidente del grupo público de construcción naval, Aurelio Martínez Estévez, antes de participar en la flotadura del Buque de Acción Marítima (BAM) Rayo, que fue amadrinado por la ministra de Defensa Carme Chacón, en el astillero de Puerto Real.
Martínez Estévez señaló que “Navantia está presente en todos los concursos que se convocan. Recientemente ha estado la ministra de Defensa de Gabón viendo las patrulleras y los barcos que hacemos aquí, pero lo cierto es que el mercado está muy difícil. Igual que en España estamos en dificultades, en otros países también y los gobiernos cuando están en dificultades los primeros gastos que recortan son de Defensa”.
El presidente de Navantia también apuntó que “los astilleros gaditanos no tendrán problemas para aguantar este año y la mitad del que viene, pero a partir de entonces tendremos dificultades para mantener el nivel de actividad”.
En ese sentido, es la primera vez que una fuente oficial de Navantia reconoce las dificultades a las que se enfrentan los astilleros de la Bahía para seguir más allá de 2011. Unas dificultades que han venido anunciando desde hace varios años los representantes sindicales de los comités de empresa de los tres astilleros con la ausencia de nuevos contratos, así como la “sangría” de despidos que esa falta de carga laboral está originando en las empresas del sector de la industria auxiliar.
El astillero de Navantia Puerto Real vivió ayer también una situación inédita, al menos en público, al acercarse el presidente del grupo a un grupo de sindicalistas que con una pancarta pedían al Gobierno Carga de trabajo ya, por un futuro para los astilleros de la Bahía. Martínez Estévez saludó uno por uno a todos los sindicalistas allí presentes y no dudó en dejarse fotografiar detrás de la pancarta que pedía más carga laboral para los astilleros.
Martínez Estévez confirmó que los recortes anunciados por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero no van a afectar a la carga de trabajo en marcha, ya que se trata de programas con muy poco margen de maniobra y que se van a terminar sin problemas de financiación. Otra historia es la nueva carga de trabajo que pueda venir. “Estamos abiertos a construir cualquier cosa, plataformas, compuertas, barcos, lo que sea. Lo fundamental es que haya carga de trabajo en los astilleros”.
los nuevos bam
Lo que realmente se está demandando desde todos los sectores al Gobierno es que autorice al Ministerio de Defensa a contratar la segunda fase de los BAM, que supondría cuatro nuevos barcos y dos años más de tranquilidad en los astilleros de la Bahía.
Hasta el propio presidente de Navantia dejó caer esa posibilidad cuando se le preguntó sobre la posibilidad de que la ministra anunciara el contrato de los nuevos BAM. “Habrá que esperar hasta el discurso de la ministra para saber si hay alguna novedad”, dijo.
Esa “cercanía” de Martínez Estévez con los sindicatos y la franqueza con la que se expresó ante los medios de comunicación que cubrían el acto chocó frontalmente con la actitud adoptada por la ministra de Defensa, de obviar las protestas silenciosas de los sindicatos, y atenerse al discurso que traía preparado, que finalmente no incluyó ninguna referencia a esos nuevos BAM, tan sólo a que la relación entre la Armada Española y Navantia se “mantendrá” en el futuro, sin especificar si será en un futuro cercano o los proyectos que los vincularían.
Probablemente podría referirse a la continuación de los programas de modernización del Grupo de Combate autorizando los trabajos sobre las fragatas F-85 Navarra y F-86 Canarias.
el discurso de chacón
Así, la ministra de Defensa, Carme Chacón, manifestó que la colaboración entre la Armada Española y Navantia “va a continuar”.
Durante su alocución como madrina del buque de guerra, la titular de Defensa afirmó que el buque Rayo es “el resultado de un esfuerzo que comenzó hace ocho años ante la necesidad de la Armada de contar con buques de máxima acción”. Asimismo, señaló que los BAM son “un nuevo referente” por su diseño y su interacción.
Además, recordó que detrás de este buque hay “un esfuerzo” de 3.000 personas y que la construcción de los cuatro BAM supondrán tres millones de horas que los trabajadores de Navantia han dedicado a Armada para su mejora.
Carme Chacón destacó que el BAM es un patrullero que ofrece altas prestaciones y gran versatilidad para la realización de sus misiones, entre las que se encuentran la protección y escolta de otros buques, el control del tráfico marítimo y de piratería, operaciones contra el narcotráfico y el tráfico de personas, el rescate y salvamento marítimo, apoyo a situaciones de crisis y ayuda humanitaria, así como control de pesca y medioambiental.
Por su parte, el presidente de Navantia, ya durante su discurso oficial, manifestó que los BAM son “una prueba de tecnología y esfuerzo” de los trabajadores de Navantia y añadió que este barco representa el “importante papel” que la Marina representa en el tráfico marítimo y viene a dar “una respuesta ágil” a ese papel.
Martínez Estévez señaló que la Armada es para Navantia “su máximo escaparate”. No obstante, en declaraciones a los periodistas, indicó que con la actual carga existente se puede “aguantar” un año y medio, por lo que advirtió que “hay que conseguir algunas cosas más”.
Antes de asistir a la flotadura del buque Rayo en el astillero de Puerto Real, la ministra visitó en la Base Naval de Rota las obras realizadas para la prolongación del muelle número uno, construido por Acciona, y que fue entregado a la Armada en la mañana ayer.
La presencia de la ministra de Defensa en la Bahía provocó las primeras reacciones como la del presidente del Partido Popular de Cádiz y parlamentario andaluz, José Loaiza, que mostró su sorpresa ante la visita de la ministra para la puesta a flote del Buque de Acción Marítima (BAM) 'Rayo', y “no decir nada sobre la puesta en marcha de la segunda fase de los BAM”.
El dirigente popular considera que las declaraciones de Chacón “son una tomadura de pelo para los trabajadores de Navantia, puesto que crea falsas esperanzas”. En este sentido, le exigió “que deje de marear la perdiz y se pronuncie de una vez por toda sobre la segunda fase de los BAM que garantizaría la carga de trabajo en las factorías gaditanas”.
Loaiza afirmó que lo que tenía que haber hecho ayer es “ anunciar la autorización para la construcción de los diez BAM que todavía están pendientes, en lugar de limitarse a hacer unas declaraciones vacías de contenidos y de compromiso”. A su juicio, “la ministra de Defensa debe confirmar, de una vez por toda, la necesaria carga de trabajo para los astilleros gaditanos y eso sólo se consigue cumpliendo con lo prometido y aprobado, que es la segunda fase de los BAM”.
El presidente del Partido Popular en la provincia de Cádiz exigió al PSOE gaditano que “deje de sucumbir al Gobierno de Zapatero y a Chacón y que exija a sus compañeros de Madrid a que presenten la hoja de ruta para las factorías de la Bahía y les obliguen a que autoricen la segunda fase de los BAM”.
El segundo de los cuatro BAM previstos
El astillero de San Fernando-Puerto Real celebró ayer la puesta a flote del segundo Buque de Acción Marítima (BAM) Rayo P-42 para la Armada Española. La ceremonia fue amadrinada por la ministra de Defensa, Carme Chacón y contó con la presencia del presidente de la SEPI, Enrique Martínez Robles, así como con la máxima autoridad de la Armada Española, el Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada (Ajema), Manuel García Rebollo.
El Rayo es el segundo de la serie inicial de cuatro BAM que Navantia construye para la Armada Española, según la orden de ejecución firmada el 31 de julio de 2006, y a la que se espera que sigan hasta un total de diez unidades. La entrega de este barco está prevista para 2011.
La construcción de estos buques suponen para Navantia 3,1 millones de horas de trabajo, 270.000 de ellas de ingeniería.
Se trata de un buque de “tamaño moderado, altas prestaciones, gran versatilidad en cuanto a misiones, alto nivel de comunalidad con otros buques de la Armada y coste de adquisición y ciclo de vida reducido”.
Sus principales características son: eslora de 93,9 metros, manda, 14 metros, desplazamiento, a plena carga, de 2.575 toneladas, velocidad máxima de 20,5 nudos y una autonomía de 8.000 millas. Además, cuenta con una dotación de 35 personas con capacidad para transportas a otras 35. Podrá actuar como escolta de otros buques y en operaciones de apoyo a situaciones de crisis.
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