Domingo, 22 dic 2013 | Por Redacción P | Noticias: Opinión
Jesús Varela
¿Será posible que siempre que toca arreglar un tema relacionado con Navantia nadie sea capaz de dar con la tecla adecuada?. No lo consiguió el PSOE, no lo está consiguiendo el PP y por lo que parece, por lo que le escuché el otro día a Xavier Vence, portavoz nacional del BNG, tampoco la formación nacionalista sabe a que pulsador acariciar. ¿Será verdad que quieren arreglar lo de Navantia?. Yo y por lo que se les puede ver a unos y otros, ya no me creo absolutamente nada. Ahora mismo la solución a los problemas de la compañía pasan por decisiones muy duras, antisociales, es cierto, y claro, eso nadie lo quiere asumir.
Decía hace dos semanas y en esta misma tribuna, que para encontrar soluciones a Navantia, ésta, primero tiene que dejar de ser carnaza política, para luego y a partir de ahí, poder afrontar los problemas de frente atendiendo única y exclusivamente a criterios comerciales. Y me reafirmo en ello. Sin embargo, ese marco a nadie le interesa. Aquí y diga lo que se diga, nadie está por esa labor. Navantia es, políticamente hablando, un auténtico chollo para todos, un filón. Y lo es, en cualquier momento y situación. Es el saco político sin fondo que aquí en Ferrolterra todos utilizan.
Ahora se están dando los primeros pasos “serios” para la construcción de un quinto buque gasero para Gas Natural, claro, después de la marejada política que provocó la decisión de construir los otros cuatro en Asia. Pero ¿Realmente necesita Gas Natural este quinto gasero ahora mismo? Si es así, ¿Por qué no lo contempló entonces, hace tan solo cuatro días, cuando encargó los otros cuatro? La operación le hubiese salido más barata ¿O no? Y la respuesta claramente está en otra pregunta. ¿Tiene alguien dudas ahora de que todo lo que le sucede a la antigua Bazán como a la antigua Astano es debido a decisiones políticas? El sector naval en la Ría de Ferrol no se guió nunca en base a estrategias comerciales. Ni en tiempos de Franco, ni en los de la UCD, ni en los del PSOE ni en los del PP. Nunca y ahora tampoco.
No obstante y aún considerando que este último gasero respondiese de verdad a las necesidades de la compañía energética, la pregunta es, ¿Está Navantia en condiciones de construir este buque sin que ello suponga un lastre adicional más, a su ya delicadísima situación financiera? Y es que según la empresa Elcano, Navantia no está preparada para acometer tecnológicamente la construcción de este tipo de buques metaneros de última generación. (Diario de Cádiz.es 26 – 11 – 2013) Y si esto es así, (Ni el ministro Soria ni el ministro Montoro respondieron a estas afirmaciones) ¿Por qué todos los políticos, en general, exigen la construcción del gasero y clamaron por la no construcción de los otros cuatro, cuando saben que eso va a perjudicar seriamente a la compañía?
Navantia tiene un gravísimo problema estructural y mientras no se solucione, cualquier tipo de encargo en el que participe la Bahía de Cádiz lo que hará será agravarlo mucho más. Esa es la triste realidad. ¿No se elaboró un plan estratégico para cuatro años porque la empresa tiene serias dificultades económicas y de competitividad? ¿Cómo es que se quiere abordar un contrato de esa envergadura sin solucionar antes esos problemas que dicen que les hace estar fuera del mercado? La situación de la empresa en estos momentos efectivamente es dramática, pero si de verdad en lo que se piensa es en su viabilidad futura, lo que no se puede entender es que se grave más su situación actual. Yo sigo insistiendo en que para que un enfermo cure, no queda otra que atacar decididamente el mal, cuando éste está localizado. Y en el caso de Navantia, está claro que nadie quiere coger al toro por los cuernos. Ni siquiera las organizaciones sindicales. En el caso de Navantia lo que prima, o más bien lo que triunfa, es la pura y dura demagogia.
Aquí todos le escapan a la objetividad. Unos y otros y otros y unos….. Lo que está claro, es que los problemas seguirán sin solucionarse mientras no se les busquen salidas basadas y apoyadas en el sentido común y sobre todo, razonadas desde la óptica del interés general.
Y mientras por la Ría de Ferrol esperamos pacientemente, quizá demasiado pacientemente, a la de Vigo llegó ya la tan ansiada tranquilidad y esperanza en el futuro. Pues bien, vaya para ellos desde estas líneas mi más sincera enhorabuena.
Feliz Navidad para todos en general y en particular y especialmente, para mi querida Ferrolterra.
¿Será posible que siempre que toca arreglar un tema relacionado con Navantia nadie sea capaz de dar con la tecla adecuada?. No lo consiguió el PSOE, no lo está consiguiendo el PP y por lo que parece, por lo que le escuché el otro día a Xavier Vence, portavoz nacional del BNG, tampoco la formación nacionalista sabe a que pulsador acariciar. ¿Será verdad que quieren arreglar lo de Navantia?. Yo y por lo que se les puede ver a unos y otros, ya no me creo absolutamente nada. Ahora mismo la solución a los problemas de la compañía pasan por decisiones muy duras, antisociales, es cierto, y claro, eso nadie lo quiere asumir.
Decía hace dos semanas y en esta misma tribuna, que para encontrar soluciones a Navantia, ésta, primero tiene que dejar de ser carnaza política, para luego y a partir de ahí, poder afrontar los problemas de frente atendiendo única y exclusivamente a criterios comerciales. Y me reafirmo en ello. Sin embargo, ese marco a nadie le interesa. Aquí y diga lo que se diga, nadie está por esa labor. Navantia es, políticamente hablando, un auténtico chollo para todos, un filón. Y lo es, en cualquier momento y situación. Es el saco político sin fondo que aquí en Ferrolterra todos utilizan.
Ahora se están dando los primeros pasos “serios” para la construcción de un quinto buque gasero para Gas Natural, claro, después de la marejada política que provocó la decisión de construir los otros cuatro en Asia. Pero ¿Realmente necesita Gas Natural este quinto gasero ahora mismo? Si es así, ¿Por qué no lo contempló entonces, hace tan solo cuatro días, cuando encargó los otros cuatro? La operación le hubiese salido más barata ¿O no? Y la respuesta claramente está en otra pregunta. ¿Tiene alguien dudas ahora de que todo lo que le sucede a la antigua Bazán como a la antigua Astano es debido a decisiones políticas? El sector naval en la Ría de Ferrol no se guió nunca en base a estrategias comerciales. Ni en tiempos de Franco, ni en los de la UCD, ni en los del PSOE ni en los del PP. Nunca y ahora tampoco.
No obstante y aún considerando que este último gasero respondiese de verdad a las necesidades de la compañía energética, la pregunta es, ¿Está Navantia en condiciones de construir este buque sin que ello suponga un lastre adicional más, a su ya delicadísima situación financiera? Y es que según la empresa Elcano, Navantia no está preparada para acometer tecnológicamente la construcción de este tipo de buques metaneros de última generación. (Diario de Cádiz.es 26 – 11 – 2013) Y si esto es así, (Ni el ministro Soria ni el ministro Montoro respondieron a estas afirmaciones) ¿Por qué todos los políticos, en general, exigen la construcción del gasero y clamaron por la no construcción de los otros cuatro, cuando saben que eso va a perjudicar seriamente a la compañía?
Navantia tiene un gravísimo problema estructural y mientras no se solucione, cualquier tipo de encargo en el que participe la Bahía de Cádiz lo que hará será agravarlo mucho más. Esa es la triste realidad. ¿No se elaboró un plan estratégico para cuatro años porque la empresa tiene serias dificultades económicas y de competitividad? ¿Cómo es que se quiere abordar un contrato de esa envergadura sin solucionar antes esos problemas que dicen que les hace estar fuera del mercado? La situación de la empresa en estos momentos efectivamente es dramática, pero si de verdad en lo que se piensa es en su viabilidad futura, lo que no se puede entender es que se grave más su situación actual. Yo sigo insistiendo en que para que un enfermo cure, no queda otra que atacar decididamente el mal, cuando éste está localizado. Y en el caso de Navantia, está claro que nadie quiere coger al toro por los cuernos. Ni siquiera las organizaciones sindicales. En el caso de Navantia lo que prima, o más bien lo que triunfa, es la pura y dura demagogia.
Aquí todos le escapan a la objetividad. Unos y otros y otros y unos….. Lo que está claro, es que los problemas seguirán sin solucionarse mientras no se les busquen salidas basadas y apoyadas en el sentido común y sobre todo, razonadas desde la óptica del interés general.
Y mientras por la Ría de Ferrol esperamos pacientemente, quizá demasiado pacientemente, a la de Vigo llegó ya la tan ansiada tranquilidad y esperanza en el futuro. Pues bien, vaya para ellos desde estas líneas mi más sincera enhorabuena.
Feliz Navidad para todos en general y en particular y especialmente, para mi querida Ferrolterra.