Montse Mayoral > ferrol
Australia ha decidido desviar a Navantia un nuevo paquete de obra del programa de construcción de los tres destructores AWD –Air Warfare Destroyer–, desarrollados por la compañía española en base a su modelo F-105. Los astilleros de la ría de Ferrol se harán cargo de cinco bloques del segundo buque según la nueva planificación que acaba de ser aprobada al otro lado del globo a raíz del retraso que acumulaba el astillero de BAE Systems. El encargo supondrá entre 350.000 y 400.000 horas de ocupación.
Los tres destructores de la clase “Hobart” se montarán y se botarán en el astillero de ASC, en Adelaida, si bien la construcción de los treinta bloques que conforman cada uno de los buques se repartió entre el contratista principal (ASC) y otros dos astilleros australianos, Forgacs, en Newcastle, y BAE Systems, en Melbourne. Este último es el que ha tenido problemas, en parte por estar trabajando simultáneamente en los bloques de la superestructura de los dos anfibios LHD, el “Camberra” y el “Adelaide”, el 80% de los cuales se ejecuta en Ferrol.
La decisión ha sido desviar parte del trabajo asignado a BAE a los otros astilleros australianos –ASC y Forgacs– y confiar a los españoles cinco bloques. Así, según el anuncio oficial que ayer hicieron público en aquel país los ministros de Defensa y Material Militar, Stephen Smith y Jason Clare, el retraso será de unos doce meses, en lugar de los dos años que se calculaba de seguir la planificación inicial. El reparto de trabajo del tercer buque, señalaron también, se tomará más adelante.
Oportunidad > Navantia emitió un comunicado para anunciar el nuevo contrato, que supone varios meses de trabajo para la ría de Ferrol “y llega en un excelente momento, para que ciertas áreas del astillero mantengan sus niveles de ocupación”.
Como se recordará, Navantia firmó en 2007 el contrato para el diseño de los destructores australianos, un encargo por valor de 285 millones de euros que la convirtieron en la principal subcontratista del programa, liderado por ASC. A mediados de 2009 llegó un segundo “paquete” de obra, por valor de 22,8 millones de euros, para la construcción de diverso equipamiento en la división de turbinas de los astilleros ferrolanos. Y más recientemente se decidió dejar a los españoles, también, el bloque del domo de los tres destructores, en el que va instalado el sónar, por la dificultad que representan sus formas redondeadas.
Anteriores contratos de exportación siguieron un proceso similar y terminaron por hacerse íntegramente en Ferrol. Fue el caso de las cinco fragatas para Noruega, cuyo plan inicial preveía que los dos últimos buques se ejecutarían íntegramente en el país nórdico. Sin embargo, los problemas que surgieron en la construcción de algunos bloques de las primeras unidades llevó a concentrar, finalmente, todo el trabajo en los astilleros gallegos.
Al margen de que en el futuro puedan llegar nuevos paquetes de obra del programa de los AWD para la ría de Ferrol, el encargo de estos cinco bloques se produce en un momento crítico, en el que ya escasea la actividad en las áreas de ingeniería y aceros, las primeras que intervienen en la construcción de un buque. Los trabajadores de Navantia y las compañías auxiliares protagonizaron en las últimas semanas varias movilizaciones para llamar la atención sobre la pérdida de empleo que ya se está produciendo en Fene y que se aceleraría en Ferrol a partir de este verano.
Programa > El nuevo Systems Centre inaugurado a comienzos de año en el Techport de Osborne, el nuevo astillero construido a las afueras de Adelaida para desarrollar el programa AWD, acogerá hoy una reunión con todos los responsables de las subcontratas para informar de los cambios en la planificación. Según se destacaba en el comunicado que también hizo público ayer la AWD Alliance –la corporación pública y privada que dirige el programa– este tipo de problemas en las primeras fases de un proyecto de este tamaño y complejidad no son inusuales y lo más importante es reconocerlos y enmendarlos rápidamente.
Actualmente están en construcción 27 de los 31 bloques que conformarán el primero de los destructores, el “Hobart”. El programa inicialmente previsto, que ahora podrá retrasarse hasta un año, contemplaba la puesta de quilla este año en Adelaida y su entrada en servicio en 2014. “Cuando se complete el programa –señalaba ayer el comunicado de los ministros australianos– los AWD estarán entre los barcos de mayor capacidad del mundo en su clase”. Tras el primero vendrán dos más, el “Brisbane” y el “Sydney”, que según el calendario inicial se incorporarían a la Royal Australian Navy en 2016 y 2017.
Algún medio de comunicación australiano se hacía ayer eco de la noticia apuntando que desde BAE Systems se había acusado de los problemas a la compañía principal, ASC, y también a Navantia, por proveer planos deficientes y escasa información sobre la construcción de sus bloques. Recordaron, al respecto, que los primeros problemas surgieron en octubre, cuando el astillero de Melbourne construyó una de las piezas en unas dimensiones incorrectas y comenzó a hablarse de un posible desvío de trabajo a Ferrol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario