sábado, 14 de septiembre de 2013

¿Y ahora?


foto de Andrés Vellón Graña
2 votos
El verano languidece y pasa lo que se veía que iba a pasar. La playa, las fiestas y el ocio abren la puerta de nuevo, a la cruda realidad. Que siempre ha estado ahí. No se ha ido de vacaciones. Los espejismos duran lo que duran. No es nada nuevo.
Y toca preguntar: ¿Y ahora qué? Los problemas siguen siendo los mismos. Todavía más agravados. Ferrol está tocado -que no hundido- y continúan sin llegar las panaceas prometidas. Porque hablar es muy fácil. Hacer... Eso ya es otra cosa.

La ristra de respuestas que tienen que dar los que mandan es larga. Pero las más relevantes son las que han de ofrecérsele al sector naval. ¿Cuáles son los planes? ¿Dónde están los encargos? ¿Dónde está el flotel? ¿Qué sucede con el dique flotante? ¿Cuál será el futuro de Astano sin sus vetos?
La perdiz está ya tan mareada que se ha desorientado. Las y los que han de dar decididos pasos al frente de una buena vez o miran para otro lado -ojo con esos cuellos que pueden acabar por torcerse- o se sumergen en ceremonias de la confusión. O se callan mientras se arrellanan en la poltrona para abrigarse del invierno.
¿Y ahora qué? Eso es lo que quiere saber la ciudadanía. Y eso es lo que se le está negando. Los juegos malabares están bien para el circo. Pero no para una comarca exhausta -no nos engañemos, esa es la realidad- que resiste a duras penas. Y todo esto tiene responsables. Con nombres y apellidos. Que hablen. O que se marchen. Si no saben hacer su trabajo.

No hay comentarios: